Las citas en línea se han convertido en una parte integral de la vida moderna.
Parece que es la forma más fácil de encontrar a un ser querido allí: solo abra la aplicación, desplácese por los perfiles, escriba a varias niñas, y el proceso parece ser lanzado. El servicio crea la ilusión de la ligereza y la velocidad: la relación se puede elegir casi lo mismo que la música en una lista de reproducción.
Pero, desafortunadamente, muchos hombres se enfrentan al hecho de que las primeras impresiones se dispersan rápidamente, la correspondencia no conduce a reuniones reales, y aquellos que suceden dejan un sentimiento de vacío. Al final, en lugar de alegría e inspiración de un nuevo conocido, viene la tristeza.
Estas son las siete razones principales por las cuales las citas en línea a menudo no se convierten en una fuente de placer, sino con una decepción continua.
1. Ilusión de elección
Las aplicaciones de citas se organizan de tal manera que mantenga su atención el mayor tiempo posible. La cinta del cuestionario es interminable, y siempre tienes la oportunidad de seguir adelante; desde un punto de vista psicológico, esto crea la ilusión de la opción ilimitada.
Comienza a tratar la búsqueda de la niña como compras: si un cuestionario no se ha enganchado, entonces el siguiente probablemente será mejor. Tal actitud forma una visión del consumidor de una relación: no miras a la niña como una persona viva, sino que lo percibes como un elemento de una ventana que se puede reemplazar.
Esto se debe al fenómeno, que los psicólogos llaman la “paradoja de la elección”: cuando hay demasiadas opciones, la decisión de tomar es más difícil, y la satisfacción cae. En lugar de centrarse en una persona, el cerebro tiene el pensamiento todo el tiempo: “¿Qué pasa si extraño a alguien aún mejor?” Como resultado, el hábito de desplazarse por los perfiles se forma sin cesar, pero no para dar pasos reales hacia.
2. La idealización del interlocutor
Una correspondencia en línea no es una comunicación completa, sino solo su fragmento. Ves mensajes y fotos individuales sobre la base de las cuales construyes una imagen holística. El cerebro humano está tan arreglado que siempre completa los detalles faltantes.
Como resultado, en lugar de una chica real, comienzas a comunicarte con la imagen creada por tu imaginación. Un par de frases con humor, y ya piensas que es ligero e ingenioso, y una hermosa fotografía da la sensación de que es segura y atractiva.
Tal “finalización” está asociada con el efecto del halo: una característica positiva fortalece automáticamente el resto, pero cuando llega a una reunión real, el ideal imaginado colapsa. La brecha entre la fantasía y la realidad causa una fuerte decepción y la sensación de que fuiste engañado, aunque de hecho te engañaste.
3. El efecto de la “máscara”
Internet ofrece libertad de auto -presentación: todos pueden editar fotos, elegir los mejores ángulos, usar filtros, escribir un cuestionario con frases cuidadosamente seleccionadas. Como resultado, se crea una “máscara”, una versión mejorada de la personalidad.
En la etapa de correspondencia, esto funciona: obtienes una imagen atractiva, las palabras coinciden con tus expectativas, pero en comunicación real esta máscara vuela rápidamente. Gestos, entonaciones, reacciones a pequeñas cosas: todo esto no puede ser falsificado durante mucho tiempo.
En este caso, se desencadena el mecanismo de disonancia cognitiva: su cerebro no puede combinar dos pinturas diferentes, la que viste en Internet y la que conociste en la vida. Cuanto más fuerte sea la brecha, más brillante es la decepción.
4. Reducir el valor de la comunicación
En las aplicaciones, la moneda principal es la atención. La correspondencia se estira, los gustos y las pegatinas reemplazan las emociones reales. Puede enviar y aceptar mensajes durante horas, pero al mismo tiempo casi no reconoce a una persona más profunda.
El problema es que el cerebro percibe la comunicación del texto como un sustituto del contacto en vivo. Parece que hay una conexión, pero hay poco relleno emocional. La correspondencia no causa el nivel de confianza que se forma en una reunión personal, donde las expresiones faciales, los gestos y la entonación funcionan.
Con el tiempo, esto conduce a una disminución en el valor de la comunicación misma. Te acostumbras a una reacción rápida: recibí un mensaje, respondí, y parece que esto es suficiente. Pero cuando llega a una reunión real, el vacío se vuelve obvio: detrás de docenas de mensajes, puede que no haya una verdadera cercanía emocional.
5. Atención sobre sobrecarga
Muchos hombres se comunican simultáneamente con varias niñas a la vez, creyendo que esto aumenta las posibilidades de éxito, pero desde el punto de vista de la psicología, esto funciona al revés.
Los recursos emocionales de cualquier persona son limitados. Cuando rocías atención, cada comunicación sigue siendo superficial. No invierte en una historia específica, sino que solo apoya el flujo general de correspondencia, y esto reduce las posibilidades del desarrollo real de las relaciones.
Los psicólogos llaman a un fenómeno “multitarea emocional”. El cerebro no puede tener la misma profundidad de interés en varios interlocutores a la vez, como resultado, se cansa, pierde su motivación para continuar la comunicación y también decepcionado en el proceso en sí.
6. inconsistencia de las expectativas
Los perfiles en aplicaciones de citas son una herramienta de autopromoción. Las personas escriben sobre sí mismas de tal manera que despertaran el interés: alguien exagera, alguien oculta los detalles, alguien se da a sí mismo de manera rentable.
En la etapa de correspondencia, esto no es sorprendente, sino cuando comienza la interacción real, salen hábitos, características, pequeñas cosas del hogar. Si la realidad es muy diferente de la declarada, surge el efecto de la inconsistencia de las expectativas.
Psicológicamente, parece un engaño: su cerebro percibe la situación como si fuera engañoso. Incluso si la niña no escondió específicamente nada, la brecha entre la promesa y el hecho se percibe dolorosamente.
7. Falta de preparación para las relaciones
Finalmente, una de las causas más comunes de decepción es la diferencia para los propósitos. Puede ir a la aplicación por el bien de la curiosidad o la comunicación fácil, y a la niña para encontrar una pareja seria. O viceversa: Estás listo para una relación, y ella fue a “matar el tiempo”.
Cuando las expectativas no coinciden, la comunicación rápidamente llega a un callejón sin salida. El escenario de las relaciones juega un papel importante aquí: cada persona tiene sus propias actitudes internas que determinan lo que espera de la comunicación. Si los escenarios no coinciden, tarde o temprano hay un malentendido y la sensación de que se ha desperdiciado el tiempo.